31 mar 2012

Estado de existencia


 
Cada ser humano de este planeta, en cada instante se encuentra deambulando entre diferentes estados físicos, mentales, emocionales y energéticos que se funden en un estado de existencia.

Dependiendo de del estado de forma del cuerpo, del sistema de creencias sobre el que basemos nuestra existencia, de la capacidad de gestionar nuestras emociones en cada instante y del estado energético en el que nos encontremos, tendremos un estado de existencia diferente.

Cuando nuestro cuerpo tiene salud y el dolor no está, es más fácil estar bien, pero, cuando el dolor está presente, la dicha es muy complicada de generar.

Nuestro sistema de creencias podrá, de igual forma, acercarnos a estado de mayor o menor dicha en nuestro desarrollo existencia. No es lo mismo apoyar nuestra forma de relacionarnos con los demás en la creencia “Todos somos hermanos” que en la idea “No te puedes fiar de nadie”.

La forma en la que gestionemos nuestras emociones podrá, de igual manera, permitirnos permanecer en un estado de calma y serenidad, o en una constante guerra emocional con todo lo que nos rodea. Si alguien que sufre la emoción de la ira, no aprende a gestionarla, terminará viviendo en un estado de odio y malestar constante que irá emergiendo cuando algo externo anime a que esta emoción incontrolada nazca.

La energía con la que nos desenvolvemos en la vida es de suprema importancia, ya que sin ella no podríamos desarrollarnos como seres humanos. De ahí la importancia de conocernos, saber como funcionan nuestros ritmos y respetarlos para que cada día sea una fuente de dicha con todo lo que nos rodea.

El cuerpo, la mente y el corazón se nutren mutuamente, como si de un baile se tratara en el que cada uno aporta lo que puede.

Si deseas alcanzar un estado de existencia dichoso, debes tener en cuenta cada una de estas partes para alimentarlas adecuadamente. Podemos mantener un estado de existencia más o menos saludable dependiendo de nuestra gestión interna.

Lo que comemos es tan importante como lo que pensamos, pues, en definitiva es una forma de nutrirnos, e igual que el café es un excitante, el pensamiento “la vida es un sufrimiento” terminará llevándonos a un estado de malestar. 

Una emoción descontrolada podrá, igualmente, desencadenar un estado de enfermedad, por la sencilla razón de que afectará a nuestro cuerpo, a lo que comemos, a nuestros pensamientos y a nuestro estado energético.

Tomar el control y elegir crear un estado de existencia apropiado es un trabajo artesanal que debe comenzar por elevar nuestro estado de presencia cada instante… 


26 mar 2012

Estoy bien, estoy mal y estado de ser



Seguimos prolongando nuestra existencia sin más, olvidando que la habilidad de estar presente es un estado que requiere una constante conexión con la respiración, fuente imprescindible para seguir existiendo, participando y compartiendo la experiencia de la vida. Evaluar nuestro nivel de dicha nos permite reconocer si estamos o no en el sendero correcto.

El estado correcto es la dicha pero no solemos habitar este sentimiento mucho tiempo, debido a que nuestra mente vuelve a tomar el control sobre nuestra experiencia vital. Si yo te pregunto ahora qué tal estás, ¿qué me responderías, si las únicas dos opciones fueran, bien o mal?

Por alguna sencilla razón tenemos la habilidad de elegir una de las dos descartando la posibilidad de que ninguna sea cierta y de que haya un estado que vaya más allá de la evaluación mental que seguimos haciendo de todo como "bueno o malo".

Si me siento bien, puedo seguir disfrutando de la fuente de dicha que me proporciona dicha sensación y si estoy mal, siempre puedo ir al origen que nos impide estar dichosos. Aunque, aun podemos ir un poco más allá del estado de bienestar o sufrimiento; hacia un estado de ser que no se identifica con ninguno de los dos anteriores ,a pesar de tener más matices de dicha que de sufrimiento, por la sencilla razón de apoyar la razón de su existencia en una profunda comprensión de que todo es como sucede ante nuestros ojos y que solemos identificar como "la vida".

Pero, ¿cómo podemos alcanzar dicho estado de ser?

Mientras lees esto, dime cómo es tu respiración ahora, y ahora, y ahora… Y ahora, ¿cómo es tu respiración? Y si te preguntase sobre que parte del cuerpo estás proyectando el peso, qué me dirías. Lo sientes, ves la presión que hay en esa parte del cuerpo. Y si te preguntase si te inquieta algo en tu vida, ¿dónde mirarías? Y ¿cómo gestionas las emociones que te genera observar esa “preocupación o problema”?

El estado de ser nos permite, siempre desde la presencia, liberarnos de la ataduras de la mente y sus caprichos, llevándonos a un estado de simple presencia y comprensión profunda de la impermanencia de todo lo que nos rodea, pudiendo degustar, como simples observadores, ese fluir… Aportando ese trozo de tiempo de existencia de forma lo más correcta posible.

Respirar, observar y hacer un buen uso de nuestro poder y existencia es un don divino que todo ser humano debe poder realizar… En el libro que la energía creadora me ha permitido  escribir, a través del cual expreso la senda que proporciona dicho estado de ser, el plan divino me ha dado la oportunidad de plasmar con palabras una senda que aun sigue siendo un misterio para muchos, pero, si comienzas a caminar, LO VERÁS CON TUS PROPIOS OJOS.

¡Ven conmigo y recorre el sendero que te ha estado
vedado tanto tiempo! ¡Libérate de tu mente y despierta a la vida!


Elevar la conciencia



  El ser humano, a diferencia de los demás seres vivos, tiene la posibilidad de saber en todo momento, lo que está haciendo, pensando, sintiendo y proyectando a nivel energético.

  Para que esta posibilidad nazca y se convierta en una habilidad en el aspecto físico, uno debe decidir llevar su atención hacia lo que hace en la vida, desarrollando la habilidad de percibir la dimensión física en todos sus aspectos, como son la temperatura, el peso, la forma, el olor, el sabor, el color y todos aquellos datos que nuestros sentidos físicos canalizan para nosotros. 

  En el aspecto mental tendremos que tomar la decisión de observar los pensamientos que nutren nuestro entramado mental. Percibir el sistema de creencias sobre el que apoyamos nuestra forma de estar y hacer las cosas es un acto consciente que nos abre la puerta al conocimiento sobre las ideas, pensamientos y valores que mueven nuestro campo físico.

  Las emociones pueden, igualmente, ser observadas para ser conscientes de ellas. De esta forma nos hacemos conscientes o sabemos cuál es la sensación que estoy teniendo, qué lo ha detonado y hacia donde me proyecta mental y físicamente. Observar las emociones, al igual que saber lo que estás haciendo y pensando, nos abre una nueva puerta hacia estar, ser y hacer conscientemente. 

  Con respecto al campo energético podemos aplicar la misma fórmula que en las tres anteriores, haciéndonos día a día más hábiles en su percepción, proyección e influencia en todo lo que hacemos, pensamos, sentimos y finalmente somos. Hay que comprender que esté campo es más sutil y escabroso de trabajar, necesitando para ello de un enfoque paciente y constante en todo lo que hacemos, pensamos y sentimos durante el desarrollo de nuestra actividad humana. 


23 mar 2012

Mi alma habla



El escrito de hoy, puedes leerlo con o sin música, aunque, si lo haces con la música que propongo y estás muy sensible, será fácil que te emociones. Lo dejo a tu elección:


  
Me entristece ser feliz en un mundo donde hay tanto dolor y sufrimiento, pero debo seguir sonriendo, para compartir un poco de cordura y dicha a tanta oscuridad. Hoy siento que mi corazón late con menos alegría por el conocimiento de que la madre tierra sufre por que sus hijos no la respetan. Hoy siento mi alma encogida por el conocimiento de que esta gran familia pospone el amor a la codicia y la ambición, sin darse cuenta que ese camino le separa de la verdadera dicha.

Me duele el alma al pensar que seguimos dormidos, aun sabiendo que todo sigue un plan divino y que debe ser así, como si mi pastilla se hubiera terminado y me hubieran obligado a despertar antes de tiempo.

¿Cómo puede una madre
superar el dolor de la pérdida de un hijo,
sino es a través del profundo conocimiento
de que todo está en continuo cambio
presa de la impermanencia de la vida?

Hoy solo quiero decirte una cosa: te amo, y repetirla en cada aliento que la vida me regale, para, de alguna forma hacerte saber que tú también estas despertando y sientes que lo más hermoso que un alma puede hacer para volar es amar por encima de cualquier cosa y que para vivir hace falta muy poco, tan poco que podríamos guardarlo en nuestro pequeño corazón en forma de dicha tras darlo todo.

Disculpa mi sensibilidad y mi transparente forma de escribirte, hermano mío, pero no he podido retener el deseo de hacerte saber, si estás ahí, que te amo siempre y que tu luz seguirá brillando, pase lo que pase, en ese destello de cordura que hay en cada instante de nuestra vida, en cada cosa que piensas con equilibrio, en cada palabra que regalas desde el cariño y en cada gesto que alumbra al mundo. 

No permitas que el día se vaya sin haber regalado una sonrisa, sin haber alegrado el día a alguien o sin haber compartido un poco de dicha con todos los que te rodean. Tú eres la luz que ilumina el oscuro mundo donde la vida se desarrolla y permites que la semilla del amor de frutos mañana. Pero, recuerda que las semillas hay que plantarlas hoy y que tú tienes ese poder divino dentro de ti, el cual, te ayudará a afrontar la gran dificultad de amar en un mundo lleno de pena y desdicha, con la única misión de alumbrar el camino hacia el corazón. 

Un abrazo inmenso que siento en mí, de ti, en este instante. 


21 mar 2012

Estado de dicha y presencia



Deseamos estar bien, ser dichosos y disfrutar de la felicidad pero, ¿estamos haciendo lo que debemos para crear las condiciones adecuadas para que este estado nazca y nos embriague con su esencia?

La presencia, estado en el que uno conecta con profundidad con el ritmo de la vida y su sentido, es algo que crece con la práctica. A través de ella aprendemos a gestionar nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestros sentimientos, nuestra forma de comunicarnos y, por lo tanto, el destino que vamos creando en cada paso que damos.

Desde la presencia despertamos al único momento en el que podemos percibir lo que es realmente existir en el plano físico, el presente, para entender su funcionamiento y aprender a comunicarnos con la vida de una forma fluida y correcta.  

La presencia es el primer pilar que uno debe construir para hacer nacer la dicha en cada día de su vida, sin presencia no hay conciencia ni control de la intención de cada uno de nuestros latidos, pensamientos, palabras y actos.

La vida sigue avanzando mientras nosotros envejecemos. Si deseas comprender que todo es impermanente, debes elevar tu capacidad de conectar con la vida en cada mágico momento en el que todo ocurre, pues esto te hará dichoso, haciéndote comprender que las cosas son como son, que todo sigue un plan divino y que la dicha emerge cuando dejamos de analizar, evaluar o controlar lo que esta fuera de nuestras manos.


Tú eres un mero espectador que, a lo sumo,
puede aportar su pequeño granito de arena,
aunque, si lo haces con presencia, gran observación y
un profundo y correcto uso de tu poder,
además de espectador, serás creador de todo lo que ocurre.


Comienza a respirar, en este instante, conscientemente del valor de dicha oportunidad. Observa como respirar conscientemente sosiega tu mente y apaga la sed de tu alma por expresarse. Conecta con cada latido de vida, con cada sensación corporal vital, emoción nacida o pensamiento proyectado, y permite que la energía de amor se exprese a través de ti, pues tú eres un canal divino que el universo y creador utiliza para expresarse.

Un inmenso abrazo. 


17 mar 2012

Recuerda que pensar es una actividad de la mente



Seguimos buscando métodos y prácticas que nos ayuden a elevar la sensación de felicidad en nuestra vida, sin darnos cuenta de que el camino está más cerca de lo que creemos.

Diáriamente nacen nuevos gurús que afirman haber encontrado una nueva forma de alcanzar la dicha interior, pero, el camino ya ha sido revelado y solo aquel que decide ponerse manos a la obra con disciplina, perseverancia y fe descubre el verdadero sentido de la vida y la forma de vivirla.  

La mente seguirá con su actividad y tratará, a través de la actividad de pensar sin parar, de hacernos creer que hay que llegar a una meta o que estamos recorriendo un camino hacia algún lugar.

A través del pensamiento no lograremos alcanzar nada, pues, este es una actividad mental que nos roba el instante presente y nos vuelve a enredar en especulaciones que sólo provocan distracción y ausencia de presencia hacia el desarrollo de lo que realmente es la vida en cada instante.

La vida es una sucesión de experiencias impermanentes que nos ayudan a percibir la posibilidad de presenciar sin más, todo lo que sucede, comprendiendo que debemos aprovechar cada instante para añadir nuestro protagonismo en ella.

Pensar solo te lleva a especulaciones
que te roban la presencia, desde la que todos,
podemos presenciar la impernanencia de la existencia.

Despierta de la ilusión mental que te hace creer que lo que estás viviendo es algo sólido y añade cada instante que seas capaz tu presencia y buen uso de tu poder dentro de este infinito decorado universal que cambia y se transforma cada segundo.

Todo está en constante movimiento y solo podemos discernirlo desde el poder que nos confiere la poderosa presencia, desde la que nacemos y morimos cada instante con total apertura y fidelidad a seguir permitiendo al alma proyectarse desde nuestro caduco habitáculo, el cuerpo.

Recuerda que naces al momento presente desde la sencilla y poderosa conexión que te da la respiración consciente. Para consagrar tu poder de presencia, debes estar presente más tiempo durante tu vigilia.


¡Respira y despierta
respira y observa
respira y nace
expira y muere
aquí y ahora, eternamente!

 
  

15 mar 2012

¿Estas viviendo el día de hoy?



Seguimos creyendo que vivir es haber hecho lo que se supone que tenemos que hacer, dejando un día más detrás de nuestra existencia, pero vivir es mucho más que realizar las habituales actividades mundanas distraídos por pensamientos que nos roban nuestro verdadero poder como seres divinos. Vivir se apoya en la voluntaria forma de seguir en contacto con esa sensación interior de dicha que te proporciona estar despierto y que podemos alcanzar con la práctica diaria.

Podemos seguir viviendo entre altibajos mentales de felicidad y tristeza, en los que la desdicha es mucho más profunda que los estados puntuales de bienestar, o podemos comenzar a recorrer el sendero hacia un nuevo enfoque de vida, apoyado en la presencia.

Nuestra mente es un incansable guerrero dispuesto a luchar para tener todo el protagonismos de nuestra existencia, pero, ante la respiración consciente no tiene nada que hacer, siempre y cuando la mantengamos el tiempo suficiente y estemos alerta en todo momento, pues, en cuanto bajemos la guardia, la mente volverá, siempre dispuesta y decidida, a gobernar nuestra vida, llevándonos hacia el pasado y el futuro, en el que el presente muere y la ilusión vuelve a dormir nuestro poder.

¿Cómo es tu respiración ahora?
¿Eres feliz en este preciso momento?

Si la respuesta es negativa, es que estás bajo el control de la mente, de alguna cuestión mental que activa tus funciones vitales ante el “ilusorio peligro” que acecha en “la mente”.

Para un momento, siéntate y respira con calma, suelta el aire, llena de nuevo, suelta otra vez hasta que estés en calma y abre los ojos. Observa qué ves y te darás cuenta de que no pasa nada, de que la vida no es otra cosa que una sucesión de acontecimiento impermanentes que podemos observar y de los que podemos participar desde la presencia.

La auténtica felicidad nace en la presencia. La mente siempre es cuna de ilusiones, enfermedad y sufrimiento, y por eso es tan importante trabajar con disciplina para estar alertas, despiertos a cada instante mágico del presente que siempre está moviéndose en un eterno nacer y morir, del que podemos ser protagonistas en primera fila si lo deseamos.

Si deseas vivir este momento, para, respira y abre los ojos para ver lo que ocurre desde una mente en calma. Pronto verás que la vida es simplemente eso, un nacer y morir constante del que la mente nos saca con sus ilusiones para hacernos perder la realidad y sumirnos en el sufrimiento.

¡La vida es sencillamente eso,
un acontecimiento que sucede a otro
y del que nosotros podemos participar
sabiendo que todo es perecedero.
Esto nos trae la dicha eterna!


Yoga: tu rincón de práctica personal.

Es de suma importancia aplicar una práctica a nuestra vida y mantenerla hasta que se produzca el cambio deseado, que no es otro que el de tener dicha interior cada uno de los instantes de nuestra vida.

Dicha práctica debe ir ligada a trabajar cuerpo y mente. De ahí la eficacia del arte del yoga, a través del cual, yo encontré la luz que hoy degusto cada instante.

En este artículo voy a proponer una sencilla tabla a la que deberemos acompañar de un pequeño calentamiento antes de comenar a realizarla.

Te propongo seguir los siguientes pasos:

  1. Elegir un espacio donde vas a llevar a cabo tu práctica.
  2. Disponer de un antideslizante y las ayudas que vayas necesitando, como pueden ser unos ladrillos de goma, una cinta y una mantita para la relajación final.
  3. Elegir una hora en la que todos los días vas a llevar a cabo tu práctica.
  4. Ser rigurosamente fiel a los pasos que te voy a ir marcando para sacar el máximo provecho a la práctica.
  5. Comenzar hasta crear el hábito, ser disciplinado, perseverante y fiel a la práctica.

La tabla que puedes hacer es la siguiente:

 
     












¡Comienza a caminar y 
aprende sobre la marcha!




14 mar 2012

Reencontrarse con uno mismo para despertar de la ilusión




Pasan los días, el tiempo sigue su rumbo marcándonos ese final que todos estamos condenados a vivir, pero, ¿quién habrá tenido la sensación de haber vivido una vida real?

Pasan las estaciones y seguimos dejando que la mente domine nuestra vida, permitiéndola que siga zarandeándonos entre el pasado y el futuro, sin darnos un instante para percibir el instante mágico del presente donde sucede todo.

El arte de estar presente es una habilidad que se va alcanzando día a día con la práctica, con la iniciativa, disciplina y perseverancia suficiente hasta lograr despertar del sueño mental en el que hemos sido introducidos de niños, mucho antes de madurar un alma amorosa.

¡Debes comprender que tú has sido programado mentalmente
para estar dormido y vivir una ilusión mental!

Pero, ahora que sabemos que existe una llave hacia el despertar de la ilusión, solo tenemos que comenzar el camino día a día, poco a poco, hasta que seamos conscientes del circo planetario en el que estamos envueltos y en el que cada pensamiento, palabra y acto lo fortalecen o debilitan.

Si deseas aportar tu granito de arena al bienestar de todos los seres de este planeta, despierta y se consciente del juego mental en el que te has embarcado desde hace mucho tiempo, sin haber podido degustar conscientemente la verdadera vida para la que hemos sido enviados a este planeta.

¡Tú eres un ser divino, de inmenso poder que ha nacido para
amar y compartir la belleza de este inmenso planeta en el que vivimos!


Pero el miedo y la incertidumbre, la falta de costumbre a percibir el verdadero paraíso, nos impide despertar, y si no tenemos la suficiente iniciativa y fe para hacerlo, será complicado que se produzca.

Camina con disciplina, con fe y aumenta tu atención a la respiración hasta que la luz se haga en tu camino, hasta que el amor desborde tu vida y descubras la ilusión en la que has estado viviendo.

La vida es algo mucho más sencillo donde para vivir la experiencia de existir en el plano físico de este planeta sólo necesitamos cubrir unas mínimas necesidades para, desde ahí, desplegar el inmenso universo de vitalidad, energía y posibilidades que nos brinda un cuerpo y una mente alineadas.

¡El día que tú despertar sea prolongado comprenderás que el
único instante que siempre ha existido es el que ahora estamos
compartiendo, en el cual, todo ocurrió, ocurre y ocurrirá, por ello,
VIVELO Y SÉ PARTE DE ÉL!



13 mar 2012

Percibir más allá de la respiración


La respiración consciente es el primer paso hacia la libertad que genera crear un espacio silencioso en la mente para despertar la poderosa presencia, desde la que percibir la realidad tal y como es. Pero, no es el último paso en el largo sendero del autoconocimiento, pues, a la vez que vamos haciéndonos hábiles en estar presentes, vamos introduciéndonos en una nueva forma de relacionarnos con todo lo que nos rodea. Comenzamos a percibir el dulce sonido del silencio, la ingenua forma de existir de los niños, la poderosa influencia que tiene la mente y su confusión en las enfermedades y el sufrimiento, el funcionamiento en cadena del sistema en el que vivimos, la ilusión en la que participamos mientras estamos dormidos y de la que nos liberamos cuando despertamos, entre muchas otras cosas.

Tú, ser divino, que estás dormido, despierta y despliega las alas que permiten volar a las almas, para aportar un poco de luz al sueño en el que los demás están sometidos por la influencia del sistema en el que estamos.

Tú, ser amoroso, que estás dormido y confundido, despierta a la verdadera vida terrenal en el paraíso que hay oculto en la ilusión en la que vives, aportando esa caricia consciente, esa porción de compasión hacia el que aun sigue dominado por su mente.

Tú, alma encarcelada, expresa aunque sea solo por un segundo, la necesidad de amar que todos llevamos dentro para, desde ella, aportar un poco de aliento a los agotados corazones que derraman su sufrimiento en este hermoso planeta.

Tú, hermano mío, aporta un pensamiento, palabra y acto correctos que añadan luz a la oscuridad en la que estamos viviendo en este radiante planeta en el que un día todos saldremos de la ilusión para descubrir la mentira en la que la mente nos ha sumido durante tanto tiempo para descubrir que vivir es simplemente amar y que amar es simplemente ayudar a que los demás despierten de su sueño mental.

Existe una forma de hacer un mundo mejor y nace en tu corazón, en este preciso instante, ese en el que te abres a creer en ti, en tu semilla interior de amor. Solo tienes que mantener el sendero que te marca ese camino…


La mente y su constante actividad



Últimamente me hacen llegar mucho la frase “Toni, no es fácil lo que propones” y de tanto oírla me la estoy empezando a creer. No, tranquilos, seguiré trabajando con disciplina, fe y una buena dosis de energía positiva para seguir siendo referencia en el camino hacia el estado de felicidad diaria, el cual, está estrechamente relacionado con la práctica del estado de presencia.  

Ahora lo importante es saber qué posibilidades tenemos ante semejante rival llamado mente. La mente es una parte de nuestra cuerpo físico, un lugar donde nacen continuamente pensamientos, imágenes, miedos y otras cosas similares, que, aunque no tienen cuerpo, pueden invitar a que sigamos sus mandatos hasta terminar siendo reales o, aunque no lleguen a serlo, vivir las consecuencia de su posible realidad, como es el estrés, la ansiedad, el dolor y sobre todo el sufrimiento.

La práctica diaria de la presencia reduce al mínimo el poder de la mente confusa sobre nosotros y nos aporta un gran poder sobre ella. Pero, para conseguir elevar nuestra presencia y vivir a través del enfoque que nos proporciona, que no es otro que el de vivir el instante mágico de cada instante, hace falta practicar constantemente la respiración consciente.

Tú eres un ser divino con tremendo poder y para poder hacer uso de él, debes estar presente, pues, de lo contrario, tu mente empezará a zarandearte haciendo de tu vida una existencia llena de estrés, miedos, ilusiones y mucho sufrimiento.

Tú puedes despertar y para conseguirlo debes practicar la presencia, cada segundo de tu vida, y desde ahí, compartirla con los demás.

Desde la presencia la vida es una nueva experiencia donde todo lo que vivimos se convierte en algo mágico lleno de luz y de posibilidades. El miedo es desterrado y la confusión parte de un recuerdo del pasado que ya no tiene importancia.

La mente nos invita a proyectarnos hacia el pasado y el futuro, perdiendo así la dulce presencia donde todo ocurre.


¡La manera más rápida de generar felicidad
comienza por elevar tu presencia!




12 mar 2012

Respira, sigue respirando, existe y haz que emerja la divinidad



Recuerda que tú eres energía y que puedes enfocarla como quieras. Nada más levantarte, partes de ese punto cero, en el que puedes ir añadiendo los ingredientes que hagan del día de hoy una nueva experiencia.

¡Respira conscientemente,
siente tu cuerpo, agradécelo,
sonríe y vive!


Sigue observando tu respiración y disfruta de este milagro que te conecta con todo lo que te rodea. Sonríe para sentir dicha y continúa moviéndote dentro de ese contacto directo con tu respiración.

¡Siente tus pasos al caminar!

Tú eres el creador manifestado a través de un sencillo cuerpo, permítele hacer su obra a través de ti, respira, da gracias, sonríe y comparte tu presencia con los demás.

Despertemos al maestro que hay dentro de cada uno de nosotros y hagamos de este mundo una locura de dicha, en la que no quepa duda de que lo más importante que podemos hacer es amarnos los unos a los otros como única misión que hemos venido a ejercer.

Tú eres ese amor que la conciencia quieres expresar, a través de una mirada atenta, de una escucha activa, de un abrazo oportuno, tú eres lo más grande que el creador ha hecho.

¡Sorprendamos al creador
en su misma esencia,
dando aun más de lo que él pueda esperar!

Amar es existir en amor, ser amor, pensar, hablar y hacer enamorado de la vida. Amar es ignorante del miedo, ingenuo, simple, espontáneo…

¡Tú eres amor, déjate llevar y existe en tu máxima frecuencia!

A qué esperamos para existir, sabiendo que todo es impermanente y que esta oportunidad que estamos viviendo en este preciso instante, seas quien seas y tengas lo que tengas no se va a volver a repetir.

¡Toma este instante y existe como sólo tú sabes hacerlo!

Respira, conecta con el cuerpo y permite que la divinidad se exprese a través de ti, ríndete a la luz que existe dentro de todo lo que existe, recuerda que tú eres amor por expresar…




11 mar 2012

La utilidad del sentimiento de culpabilidad



La culpa es un sentimiento natural que nos ayuda a mejorar nuestra forma de vivir. En ella podemos encontrar lo que debemos mejorar para añadir mejores sensaciones a nuestra existencia.

Cuando uno se siente culpable de lo que ha pensado, dicho o hecho, solo tiene que observar el objeto que genera culpabilidad, la forma en la que lo hemos utilizado o en la que nos hemos relacionado con él y modificar, desde la presencia, una nueva manera de pensar, hablar o hacer las cosas.

Podemos especular evitando la responsabilidad sobre lo que hemos pensando, dicho o hecho o añadir presencia a nuestra forma de vivir y mejorar nuestra forma de brillar en este bello planeta.  

La mente es una diestra especuladora que nos invitará a enredarnos en discusiones sobre lo que está bien o mal. La mente es el objeto de distracción más poderoso que un ser humano puede vivir, o la herramienta divina más profunda, a través de la cual, podemos alcanzar la dicha, si hacemos por dominarla, educarla y enseñarla a servirnos.  

¿Estás siendo consciente de tu respiración
mientras lees esto o está perdido en alguna historia mental?


La única forma de doblegar a nuestra mente es adquiriendo la habilidad de estar presentes. La presencia consiste en añadir a todo lo que pensamos, comunicamos y hacemos más atención.  

Una de las consecuencias de vivir distraído es el nacimiento del sentimiento de culpabilidad. Cuando nace la culpa en nuestro interior, debemos saber manejar este sentimiento desde la presencia, con habilidad y sabiduría, pero sobre todo aprendiendo que dicho sentimiento es una alarma sobre nuestra forma de relacionarnos con los demás.

Si te relacionas con los demás de forma incorrecta e  irresponsable, tarde o temprano, el sentimiento de culpabilidad nacerá en tu interior. Este sentimiento te invita a elevar tu presencia mientras existas.

Si hablas de forma incorrecta a una persona
tarde o temprano nacerá en ti la culpa de haber hecho eso.
Pide perdón por tal acto y aprende lo importante que es
estar presente, si existes en la dimensión física.

Cada uno de nosotros puede añadir luz u oscuridad a la dimensión física en la que  estamos expresándonos. Tenemos la elección de enfocar nuestra forma de pensar, hablar y existir. Tenemos la posibilidad de hacer de forma correcta y consciente o mental y distraída.

¿Qué eliges hacer? ¿Vas a seguir distraído o
vas a hacer todo lo posible por estar presente?
Es tu elección y existe un camino para lograr
despertar la presencia en tu vida.

Una persona que está presente en todo momento, reduce muchos las posibilidades de generar culpa. En cualquier caso, si nace la culpa, la manejaremos de la siguiente forma:

  • Observa el origen del sentimiento de culpabilidad.
  • Eleva tu presencia y toma la responsabilidad sobre lo que ha sucedido.
  • Pide disculpas, personal o mentalmente. Lo importante es que asumamos la parte que nos corresponde sobre lo que ha sucedido.
  • Ábrete a mejorar tu forma de pensar, hablar y hacer y da las gracias al sentimiento de culpa por haberte ayudado a localizar lo que debes mejorar.


¡Recuerda que existe una forma correcta
de existir y esta nace desde la presencia. 
Ponla en práctica en tu vida!


 

10 mar 2012

Más allá de la meditación



La práctica de meditar se está convirtiendo para muchos en una parte importante de día. Esa parte en la que nos sentamos, mantenemos una postura estable y permanecemos expectantes ante la actividad mental, como espías, tolerantes ante los altibajos que provocan sus deseos, apegos y debilidades.

Meditar está de moda y vivimos un momento en el que ya todo el mundo parece comenzar a saber qué es meditar, pero, por alguna razón que tiene mucho que ver con el deseo y apego a las rutinas que llevamos cientos de años ejerciendo, la meditación no deja de ser una visita a la iglesia y un rezo ligero, en el que volvemos a dejar en manos de “dios” o “el creador” el trabajo a hacer.

“La meditación es una práctica
que nos ayuda a despertar para pensar,
hablar y hacer de forma correcta”

Si meditas, pero aun sigues pensando, hablando y existiendo de forma inconsciente, egoísta y apegada, aun no has aprendido la utilidad de este milenario arte.

La meditación no debe ser utilizada para elevar nuestro estatus espiritual, sino, para despertar nuestra presencia y, desde ella, llevar al mundo la paz que necesita. Cuando uno medita o pone en práctica cualquier otra técnica para elevar su presencia, debe seguir elaborando en el mundo, para hacer de él el paraíso que debe ser, pues, nuestro potencial se ha visto reducido por los hábitos que llevamos mucho tiempo practicando, sin por ello haberlo anulado completamente.

“Si te consideras un buen meditador,
demuéstralo en pensamiento, palabra y acto”

Hemos llegado al punto de ser potencialmente pragmáticos y esto nos invita a ser meditadores vivientes en todo lo que hacemos. Debemos elevar nuestra presencia, despertarla y mantenerla viva para que, durante la vigilia de nuestro tiempo de existencia, el paraíso tome forma a través de todo lo que somos en cada instante.

Si meditas pero aun eres una persona que fanfarronea, se queja y se siente víctima, aun no has alcanzado el don de esta práctica. La meditación no puede ser una cosa más que hagas en tu vida, sino, la que más importancia tenga, pues, sin presencia no eres nada, un ente más en movimiento que aporta más confusión y desastre a lo que ya está pasando.

Sin presencia no eres más que una mente que colabora con este juego mental en el que todos estamos envueltos dentro de un sistema alimentado por el miedo, la pérdida y la falta de amor hacia nuestros hermanos.

Tú eres una semilla potencialmente divina que,
con la práctica, disciplina y valor
debe despertar y manifestarte en la tierra.




Programación mental = Calidad de vida = Felicidad



Seguimos viviendo proyectados por una serie de pensamientos, ideas y verdades que nos hemos ido creyendo en nuestras primeras experiencias de vida.

Debemos comprender que la influencia de los primeros años de vida mental son de una importancia crucial de cara a todo lo que vayamos viviendo más tarde.

Si hemos nacido en un contexto donde la presencia y el buen uso de poder han sido la nota principal, lo normal será que seamos personas dichosas, pero, si el contexto donde hemos nacido ha estado protagonizado por la distracción, el miedo y un uso inadecuado de nuestro poder como seres de luz, nuestra vida será un caos lleno de dolor y sufrimiento, tensiones y estrés constante.

¡Tú no tienes la culpa de tener una mente mal educada,
pero si tienes la culpa de no hacer nada para cambiarla!

El primer paso es asumir que somos infelices y que la vida es una experiencia insípida para nosotros. Que el malestar, la ansiedad y la angustia son los ingredientes principales de un día a día complicados de afrontar.

El segundo paso es abrirse a hacer un trabajo personal disciplinado, constante y de calidad con nuestra mente, para hacer de ella un aliado hacia un estado de dicha.

Si asumes que eres infeliz y reconoces un destello de verdad en lo que acabo de decir, sólo tienes que comenzar a hacer tu trabajo personal. Yo descubrí los tres pilares sobre los que debe apoyarse la vida de un ser humano para estar bien, los cuales reflejo en el libro, pero puedes utilizar cualquier otra herramienta que creas oportuna.

¡Independientemente del camino que elijas recorrer,
en él, debe existir una serie de pasos que vayan enfocados
a hacer de tu mente un aliado y compañero de existencia!

Hoy, puede ser para ti, el primer día hacia la dicha que, nacerá dentro de una actitud de constante trabajo personal apoyado en la disciplina, la fe y el conocimiento de que la felicidad es un estado que se alcanza voluntaria y conscientemente, en el que la mente y el cuerpo bailan armoniosamente.

El cuerpo y la mente conviven y se proporcionan lo que necesitan. Pero, para lograr que ambos estén en armonía, debemos reconocer como funcionan y poner en práctica hábitos que llevan miles de años dando resultados óptimos.


¡Comienza, camina y persevera y 
antes de alcanzar ninguna meta, 
la dicha ya será parte de tu vida!




9 mar 2012

Una vida dichosa requiere cambios a todos los niveles


La felicidad es el fruto de una fórmula muy sencilla:

Pensamiento correcto = Comunicación correcta = Actos correctos = destino dichoso

Sí, de acuerdo, puede parecer un poco extravagante reflejar la dicha a través de una fórmula tan sencilla, pero, ahora explico.

Uno se levanta un día de la cama disgustado don su vida, exponiéndolo en su forma de hablar y haciendo de cada cosa que demuestra un sobreesfuerzo por sobrevivir, sin darse cuenta de que para alcanzar la dicha la primera parte sobre la que hay que incidir es nuestra mente.

Nuestra mente puede ser una herramienta divina o un tirano que haga de nuestra vida un martirio. Lo importante es que depende de nosotros que sea así.

Partimos de que hoy tenemos una estructura mental sobre la que hemos basado nuestra forma de existir y que esta es moldeable. Lleva su trabajo, no creas que es fácil, pero, la mejor forma de alcanzar la meta es dando un pequeño paso y, tras este, otro más hasta que, en cada paso vayamos encontrando ese estado de felicidad que tanto necesitamos.


¡Ser feliz no es un deseo, es una necesidad,

sin la cual, nadie viviría plenamente!

Si hemos comprendido que la felicidad es un estado que se origina en nuestra mente, y que podemos comenzar a crear una estructura adecuada para posibilitar dicha forma de existir, solo nos queda una cosa:

¡Comenzar a reformar, educar y guiar nuestra mente
es una actitud esencial para alcanzar frutos sabroso!

Todo un trabajo artesanal en el que uno se verá invitado a poner en práctica la disciplina, la perseverancia y la introspección. Si deseas alcanzar la felicidad, comienza a hacer tu propio trabajo personal para poder construir pilares sólidos sobre los que apoyar tu existencia en este planeta. La semilla está dentro de ti, pero, hay que darle tierra, agua y luz solar para que germine y dé sus frutos.

¡Ánimo, es más divertido estar feliz!


8 mar 2012

¿Cuándo es el mejor momento para comenzar a ser feliz?

 

Seguimos existiendo a través de la desdicha, la tristeza y la confusión sin decidirnos, a pesar de la gran ayuda que existen en estos tiempos, a dar los pasos en ese viaje que nos ayudará a encontrar la felicidad viviendo dentro de nosotros.

Desde que nos levantamos, hasta que nos vamos a la cama, van transcurriendo cientos de pensamientos que apoyan continuar con una vida insípida, falta de cariño y, sobre todo, aburrida, para, más adelante darnos cuenta que el único que nos impide hacer un cambio es alguien con al que llevamos viviendo toda la vida, nosotros mismos.

La mente alimenta un cuerpo para que siga atrapado en sus caprichos y cuando surgen preguntas referidas a la felicidad, simplemente acelera el ritmo neuronal para elevar la actividad cardiaca, añade un par de agentes somníferos agudos como “la vida es así” o la más poderosa “otros están peor” para que tu vida siga alimentando esta gran obra llamada vida en la que lo que menos hay es vida.

¡Ahora es el momento, ya, hoy, tú puedes lograrlo!

Debes ser consciente de quien es el que maneja tu vida, desterrando a todo aquel que esté manejando tu vida que no sea tu propio corazón. Naciste para amar y ser amado y transcurren las horas, amontonándose en tu piel, en forma de arrugas, manchas y cicatrices, sin haber vivido ni un solo instante verdadero en el que realmente hayas hecho algo que te grita tu corazón.

¡Amate de verdad!

Comienza a ser feliz iniciando esta nueva relación contigo, elevando tu presencia con una más atenta respiración, la cual, es la brújula más poderosa que haya existido jamás para todos aquellos que han despertado y deben seguir haciéndolo.

Eleva tu presencia y afronta la resaca de pereza y confusión que tu mente ha instalado en tu vida, sacúdela con unas respiraciones y una sonrisa inmensa y haz lo que realmente apasionas con todo tu corazón, pues, ES LA HORA DE SER FELIZ.

¡Hoy es el primer día de muchos días felices!

Respira conscientemente, agradece, ama, abraza, ríe, toma el sol, camina, piensa de forma correcta, habla de manera amable, se un ser auténtico, SE FELIZ…